MAPA DEL PLACER

EN BUSCA DEL PLACER: ZONAS ERÓGENAS MASCULINAS Y FEMENINAS

Todos sabemos que en nuestro cuerpo existen ciertas zonas que producen un gran placer al ser estimuladas, sin embargo, no siempre estas zonas son visibles ni conocidas por la propia persona. Por eso, te vamos a mostrar un listado de los más comunes para ellos y para ellas y te explicamos el porque de su sensibilidad.

• Boca: los labios tienen una piel muy delgada con muchas terminaciones nerviosas y vasos sanguíneos, los cuales están conectados directamente con el corazón. En concreto los bordes y las comisuras  son zonas muy sensibles, los cuales con la correcta estimulación provocan una gran activación. 
• Cuello o nuca: No para todo el mundo supone una zona erógena. Pero si es cierto que en esta zona convergen diferentes tipos de tejido lo cual hace que sea una zona sensible.
• Ombligo: es otra de las zonas que no parecen una zona erógena por excelencia, pero aunque no lo parezca existen nervios que unen el ombligo con los genitales, lo cual lo convierte en una buena zona para ir preparando a los genitales para la actividad sexual.
• Coxis: esta zona es la que encontramos encima de los glúteos, aquí desembocan los nervios que se encuentran en los genitales. Es decir, estimular esta zona eleva el deseo sexual e incrementa la sensibilidad de los genitales.
• Parte trasera de los muslos: esta zona es especialmente sensible debido a que se encuentra justo encima de nervio principal de la pierna: el nervio ciático. Según sexólogos expertos, un masaje en esta zona provocará sensaciones intensas y muy placenteras.
• Parte superior de los muslos: esta es una zona erógena masculina el flujo de sangre que llega a sus genitales también les afecta y los sensibiliza en esa zona. Durante el acto y el orgasmo, se contraen y se tensan y un masaje  justo durante el clímax relaja sus músculos y aumenta la excitación.
• Pezones: tanto en hombres como mujeres, tienen esta zona llena de vasos sanguíneos y terminaciones nerviosas, que los hacen muy sensibles. El estado de excitación provoca que la sangre fluya de sus músculos a la superficie de la piel, haciendo que se eleve la temperatura de su pecho. Los pezones se hinchan, endurecen y se vuelven más sensibles.
• Clítoris: Es la zona erógena femenina por excelencia. El clítoris es sumamente sensible, pero no sólo eso: está vinculado con los músculos de la vagina, la vulva y el útero, por lo que al estimularlo produce una sensación de placer integral.
• Frenillo: Es la zona erógena mas visible del hombre. El pene tiene partes más sensibles que otras, y una de las más especiales (además del glande) es el frenillo: la zona en la que el prepucio se une con el glande, por abajo del pene. En esta área la piel es muy delgada y sensible, incluso en hombres circuncidados, por lo que proporcionará un placer intenso.
• Punto G: El punto G es un tejido eréctil ubicado a 17 milímetros de la entrada de la vagina; su valor erótico radicaría en que está conectado de forma directa al nervio pélvico, el más grande del área genital. Como encontrarlo? Lo más fácil es usar los dedos: Habría que insertar un dedo en la vagina, con la palma de la mano hacia arriba. Cerca de la entrada se hallaría una pequeña protuberancia. Al ser estimulado, el punto G causaría una sensación semejante al deseo de orinar, pero pasará conforme ella se acostumbre a su estimulación.

Aquí encontramos las más conocidas, pero cada persona es un mapa con miles de zonas erógenas por descubrir, y que están solo a tu alcance. 

¡Suerte!