domingo, 11 de noviembre de 2012

LAS ENFERMEDADES DE TRANSMISIÓN SEXUAL


¿Qué son las enfermedades de transmisión sexual (ETS)?
Son un tipo de enfermedades que normalmente se transmiten o contagian durante las relaciones sexuales. Pueden afectarnos repetidamente  porque no generan protección y no hay vacunas contra ellas. Puede ocasionar serias y permanentes consecuencias como ceguera, esterilidad y procesos muy graves. Las mujeres y los recién nacidos son los más vulnerables.
El 85 por 100 de los casos aparecen entre los quince y los treinta años. Muchas mujeres quedan cada año estériles debido a estas enfermedades. Muchas personas se contagian cada año y su número aumenta de forma continua.
Estas enfermedades se extienden porque:
-  Las relaciones sexuales son cada vez más frecuentes, especialmente entre la juventud.
- No hay información suficiente, y en consecuencia se ignoran los síntomas. Esto contribuye a que se extiendan.
- Si se padece alguna de estas enfermedades es muy frecuente que se oculte, contribuyendo así a su propagación.
- Muchos de los síntomas no son fácilmente detectables, y con el tiempo se pueden extender a diversas partes del organismo.

  • SIDA o VIH: enfermedad transmisible, es un virus enfermedad del cual se manifiesta tras ocho o diez años por el deterioro del sistema defensivo natural de nuestro cuerpo, aparición de infecciones y procesos cancerosos resistentes. Las vías de transmisión son sangre, semen y flujo vaginal.
  • Gonorrea: infección transmitida por contacto sexual que puede afectar el recto, la garganta, la uretra e incluso el cuello del útero. Sus síntomas pueden o no aparecer, dependiendo del caso, y son: modificaciones en el flujo vaginal y del pene, sensación de ardor a la hora de orinar o irritación en el ano.
  • Sífilis: La provoca un microorganismo llamado “espiroqueta”. Se transmite por contacto sexual, por medio de la sangre o productos sanguíneos contaminados. También es posible que la madre lo transmita a su hijo antes, durante o después del parto.
  • Herpes: causada por un virus, transmitida por contacto sexual (vaginal, anal, oral-genital, incluso por las manos) conlleva dolores e inflamaciones con picor alrededor de los genitales, fiebre y escozor al orinar.
  • Clamidiasis: Se transmite por contacto sexual, por medio de la sangre o semen contaminado. Tiene como principal síntoma infección en los genitales con secreciones malolientes de un color grisáceo. Puede provocar infertilidad o contagio a los hijos durante el parto.
  • Vaginitis: inflamación de la vagina causada normalmente por una infección (organismos microscópicos), suele ir acompañado de picos y secreción.
  • Condilomas: se adquiere por vía sexual y es un virus altamente contagioso los hombres no presentan síntomas pero las mujeres presentan a veces lesiones verrugosas en la vagina, cuello del útero o en los genitales externos.
  • Infecciones en las vías urinarias: son frecuentes en mujeres, puede ocurrir independientemente del contacto sexual, se presenta como escozor y necesidad frecuente de orinar.
¿Dónde conseguir ayuda?
- Médico general
- Especialistas en Ginecologia, Dermatología, Urología.
- Centros de Planificación familiar.

- Usar preservativo o condón durante las relaciones sexuales
- Las jeringas solo deben utilizarse una vez
- No compartir objetos personales y juguetes sexuales
- Promoción del comportamiento sexual seguro mediante el diálogo abierto entre padres e hijos
- Asistencia a talleres de sexualidad
- Mantener un adecuada higiene íntima
- Evitar el uso de ropa ajustada y húmeda
- Ante una perforación o tatuaje es necesario acudir a establecimientos que cumplan todas las leyes y revisar que los utensilios necesarios para tal fin sean desechables y estén bien sellados.


Generalmente podemos caer en prototipos comúnmente aceptados, tales como, que una persona que se ve limpia y atractiva es imposible que padezca una ETS. En varias ocasiones también se cae en el error de pensar, que tan solo las personas que tengan o hayan tenido varias parejas sexuales corren el riesgo de contraer este tipo de infecciones. Esto último es falso, ya que aunque solo se haya tenido una única pareja, no podemos saber con certeza si esta persona ha estado en contacto sexual con alguien infectado.
Por estos y otros muchos motivos, la mejor postura es la de la anticipación. Acudir al especialista regularmente y realizar los análisis necesarios si así se requiriese. Ya lo dice el dicho “Prevenir antes que curar”.

1 comentario:

  1. Hola, he encontrado el blog de casualidad, me ha gustado mucho la primera entrada, hay mucha información y está muy bien desarrollada.
    Enhorabuena por el proyecto!
    un beso

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